martes, 8 de noviembre de 2011

ADOLESCENCIA (Continuación .... A mis Amigas)



En el balcón, un instante
nos quedamos los dos solos.
Desde la dulce mañana
de aquel día, éramos novios.
El paisaje soñoliento
dormía sus vagos tonos,
bajo el cielo gris y rosa
del crepúsculo de otoño.
Le dije que iba a besarla,
bajó serena, los ojos
y me ofreció sus mejillas,
como quien pierde un tesoro.

He querido dar comienzo esta entrada con este poema de de Juan Ramón Gimenez, porque su título va ligado al nombre del poema y me ha parecido tan bonito...., que he querido poneros esta estrofa.
"Adolescencia": Un periodo en la vida del ser humano,donde
 al mismo tiempo que se experimentan cambios "fisiológicos" se experimentan cambios emocionales...., tan fácil es pasar de la risa al llanto, como al revés. Esto sería, a grandes rasgos, una definición de la "adolescencia". Para mí fue, aparte de esto, un querer hacerme mayor para que se me permitiesen hacer algunas de las cosas que me gustaban. Y en esto os voy a poner algunos ejemplos de las que fuimos adolescentes en los años sesenta. Yo me encontraba en Zaragoza y me gustaba mucho el cine, casi todos los sábados solíamos ir a ver alguna película, pues bien, recuerdo que fuimos a ver "Un hombre y una Mujer"...., nos pidieron el D.N.I. y no nos dejaron entrar. Otra película a la que también se me negó la entrada. fue la famosa "Helga" en la que el único tema que se trataba era el ver "parir" a una mujer. Recuerdo a los comentaristas de aquella época, que decían que más de un espectador se había tenido que salir del cine porque no podían aguantar esas escenas.
Otra cosa por la que quería hacerme mayor, era el poder salir por la noche, aun estando en el pueblo, ni siquiera en los bailes de "quintos" podía hacerlo.
Mientras estuve en el colegio nos leyeron muchas lecturas de la vida de "santos". Una de las que más me gustaron fue la de María Goreti, aunque nosotras, a escondidas y en grupos, leíamos otros libros que también marcaron época, como fueron:"El diario de Ana Mª" y "El diario de Daniel".
Pero centrándome en cómo viví la "adolescencia" en Erla, con mis amigas, os diré que creo que fuimos felíces. Recuerdo nuestras meriendas en la cantera de Monlora, entre esas grandes piedras, escuchando a Mari Francis.... en un transistor que no recuerdo de quién era.
Recuerdo también nuestros primeros "guateques", una "apertura" en toda regla.El primero que hicimos en mi casa fue en el corral (previamente lo habíamos limpiado), como entonces estaba el Casino, tuvimos muchos "mirones", porque salían a la terraza y desde allí nos veían bailar. Más tarde tuvimos el comedor donde nos echamos nuestros bailes con discos como Ádamo, Los Brincos y todos que regalaba Fundador con su estribillo de "está como nunca".
Pensándolo bien fuimos privilegiadas, ya que años antes también un grupo de jovenes compraron entre todos un tocadiscos y se reunían en el Danubio Azul, para poder bailar al ritmo de "twis"y entre otras canciones las de  Luis Aguilé,etc..., esto lo recuerdo porque aunque jovencica había veces que bajaba a verles, y entre esa juventud recuerdo a Clemen bailando el twis descalza. Entre los jóvenes estaban Jacinto y Aureo Ramón. A estos jóvenes se les negó esta diversión ya que fue "clausurado" por el cura so pena de "condenación eterna".
Envidiaba a mis amigas que podían estar en fiestas en Mayo, esperaba ansiosa que me contasen por carta cómo se lo habían pasado, muestra de ello eran las fotos que me mandaban después de fiestas y en las que se puede ver que ya no se puede estar más "GUAPAS".
Nuestros ensayos en la arboleda debajo del puente, aprendiendo a bailar los ritmos de moda. Las mejores bailadoras eran Visi y Mª Carmen. Entre los chicos se llevaba la "palma" Hilario y otro chico que aunque no era de la cuadrilla, bailaba muy bien y a mí, que siempre me ha gustado bailar, cuando venía a "sacarme" muy gustosamente le decía que sí, este era Pedrito (el castejonero).
Con el correr de los años, cada una de nosotras nos fuimos separando y llevando nuestras vidas, pero eso no quita y estoy segura, que aunque no nos veamos con la frecuencia deseada, siempre tendremos el recuerdo de aquellos años en los que compartimos ...., secretos, emociones, risas, "novietes" y sobre todo mucho cariño.
Para vosotras, mis amigas, SALUD por encima de todo y me despido con MUCHOS BESOS para todas.